SSyPC / IFP forja nuevos policías, capacita y especializa a miles

• Más de 25 mil elementos estatales y municipales fueron capacitados en diversas áreas en el Instituto de Formación Policial. También han egresado más de mil 281 de secundaria, preparatoria, licenciatura y maestría.

Un bebé nace tras 9 meses de gestación; un policía, luego de 12 semanas de formación. Jorge lleva dos meses de capacitación inicial. Es un cadete que aspira a ser policía. Celia lleva 26 años de servicio continuos en la PEP y recibe un curso de competencia básica. Como ellos, más de 25 mil elementos estatales y municipales fueron capacitados en diversas áreas en el Instituto de Formación Policial de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana. También han egresado más de mil 281 de secundaria, preparatoria, licenciatura y maestría.

El joven se nota un poco nervioso al tomar el arma corta, la ensambla y desambla. A su lado una jovencita hace lo propio, también un poco nerviosa. El instructor sonríe discretamente al notar el leve desconcierto de ambos que se cohiben al notar la presencia del reportero que graba la escena. El muchacho viste el uniforme que dice: cadete.

Con tono fuerte dice llamarse Jorge Alfredo Robles Castañón, de 24 años de edad. Ingresó al Instituto de Formación Policial el 16 de febrero de 2018. “Llevo dos meses, estoy muy contento porque me están preparando para ser un buen policía, para defenderme y defender al ciudadano”, dice.

Jorge y decenas de cadetes reciben el curso inicial en el Instituto de Formación Policial que surgió en 1986. A lo largo de 32 años ha tenido varios nombres, pero siempre la misma misión: formar, reafirmar y especializar a los policías de Chiapas. Primero se le designó Academia de Policía y Tránsito, luego  se denominó  Instituto de Formación Policial (IFP), después  Centro Único de Formación Policial. En 2012 retornó a las siglas de IFP,  pero esta vez con una nueva modalidad: incorporaron la secundaria preparatoria,   dos licenciaturas y hasta una maestría, para cumplir con la profesionalización de los cuerpos de seguridad de manera constante y gratuita.

Nicolás de Jesús Trinidad Náfate, director general del Instituto de Formación Policial del estado de Chiapas, dio a conocer que en 2017 se capacitó a 25 mil 392 elementos en diferentes cursos, tales como formación inicial, competencia básica, sistema penal acusatorio, primer respondiente, “todos exigidos por el Sistema Nacional de Seguridad Pública para completar las metas propuestas”, indicó.

Trinidad Náfate resaltó que entre los mil 281 egresados de secundaria, preparatoria y licenciaturas, destaca la primera generación de nueve elementos con maestría en formación docente. En breve salen 20 de la segunda generación, adelantó.

Mientras entrevistamos al director general del IFP en su oficina, en un extremo del domo se encuentra un grupo de policías que recibe un curso de armamento y tiro policial. Entre ellos resalta una mujer de 62 años de edad y 26 de servicio: es Celia Pérez Ortega. Fue una de las primeras en ser formada por la entonces Academia de Policía. Ahora acude a reforzar sus conocimientos. “Vengo cada que me llaman”, dice.

Trinidad Náfate explica que los cadetes reciben una formación  inicial con 982 horas, como parte del programa rector de  profesionalización del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional  de Seguridad Pública con  materias como armamento y tiro, protección a personas importantes, cadena de custodia, entre otros.

Añadió que en cuanto a los elementos activos, se les imparte la formación continua; es decir, aunque haya llevado la formación inicial hace años, se le llama de nuevo y se le da competencia básicas.  “Por el momento Sistema Nacional  de Seguridad Pública nos obliga a  llamar al elemento cada tres años, para su curso de competencias básicas policiales y ser evaluado”. De igual forma son cada tres años las evaluaciones de desempeño, agregó.

Víctor Manuel Vázquez Medina  es instructor del Instituto de Formación Policial de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana desde hace 15 años. Tiene 36 de edad. Su función es  capacitar a los aspirantes a ingresar a la SSyPC, actualizar a los elementos activos y dar cursos de especialización a elementos municipales, estatales, ministeriales y de seguridad privada.

Vázquez Medina  ha sido  certificado en ocho competencias,  a través del Sistema Nacional  de Seguridad Pública (armamento y tiro policial,  desarrollo de capacidad física,  defensa policial,  inspección de persona,  traslado de persona,   especialización  en grupo táctico, protección a funcionarios, entre otros).

Víctor Manuel se dice satisfecho, se ve muy contento. Como se ve Celia, que en  vez de casarse otra vez al ser abandonad por su esposo prefirió ingresar a la policía. Jorge, también se dice y se muestra feliz en su formación inicial.

“He ido creciendo, somos una familia, hay mucha disciplina”, dice y afirma seguro: “quiero ser policía. Me gusta defender, cuidar, servir y proteger, dar lo mejor de mí,  poner el nombre de la SSyPC en lo alto”.

Jorge no ingresó al IFP por influencia de algún familiar. Simplemente  le nació del corazón, asegura. Y a quienes piensan seguir sus pasos, dice que las puertas están abiertas, pero les advierte que loa preparación implica disciplina, aprenderse las nomenclaturas, armamento, primer respondiente.

El instructor Vázquez Medina  reafirma lo dicho por Jorge. “Muchos se desanimas por falta de disciplina. Muchos  pueden estar bien preparados y capacitados, pero si no tienen lo básica que es la disciplina, no sirven”, remata.

El sol comienza a caer poco a poco. Las actividades siguen en el IFP de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, mismas que son de lunes a sábado,  de 8 a 19 horas.

Llegan aspirantes locales y foráneos. Los primeros se van  al concluir el curso, los segundos se quedan. Eso implica una disciplina adicional. Se  levantan a las 5 de la mañana para su aseo personal. El desayuno se sirve a las 6:00. A las 7:45 pase de lista. A las 8:00 inicia la actividad. A las 14.00 horas  se sirve la comida. Sigue más actividad  y a las 18:00 horas todos a cenar. A las 19:00 horas quedan francos.  Los de Tuxtla se van, los de fuera se quedan: van a la biblioteca, hacen deportes, entre otras actividades libres. Al final de tres meses  de teoría y práctica, nacen los nuevos policías.