TUXTLA /Escuela Jaime Torres Bodet, como "Jaimito El Cartero", evita la fatiga de tener clases

* Reconstrucción, pandemia y vacunación de profesores, los motivos de que no haya ni clases virtuales.

Los continuos asentamientos de suelo provocaron agrietamiento en las aulas reconstruidas por el sismo de septiembre 2017, en la escuela primaria Jaime Torres Bodet. Hoy se trabaja de nuevo en su reconstrucción. Esto, aunado a la pandemia, ha impedido las clases presenciales. Pero los profesores incluso han faltado a las clases virtuales.

Cinco salones y la barda perimetral de la escuela primaria Jaime Torres Bodet, ubicada en la colonia Santa María La Ribera, en Tuxtla Gutiérrez, fueron reconstruidos tras ser dañados por el sismo de magnitud 8.4 del 2017.

Sin embargo, a pesar de haber sido demolidos y construidos de nuevo, la obra presenta cuarteaduras. El director Gustavo Cárdenas Pascacio ha dicho que la zona sur oriente de la capital chiapaneca es muy proclive a los asentamientos de suelo, lo que ha causado problemas en casas, comercios y edificios públicos. La escuela Jaime Torres Bodet no fue la excepción, pues fue construida sobre un suelo fangoso, con movimientos frecuentes.

Esta obra presente y la pandemia, dijo a padres de familia y medios de comunicación, han impedido el retorno a clases presenciales.

Es cierto. En el lugar hay cerros de tierra por zanja cavada para la barda. Este domingo dos trabajadores no hacían nada más que rasurarse. Eso sí los partidos de fútbol en el campo de la escuela no se suspenden y los cobros puntuales siguen.

La obra va muy lenta, a menos de 20 km/hr que es la velocidad máxima permitida por el señalamiento vial del lugar.

Padres de familia de la citada escuela saben de esta situación y entienden los motivos de las no clases presenciales. Pero manifestaron que "los profesores se pasaron porque se han ausentado aun de sus clases virtuales".

Cárdenas Pascacio dijo a un medio local que es cierto este ausentismo. Los docentes han faltado con el argumento de la aplicación de la dosis de refuerzo anti COVID-19.

El director consideró que en un mes o mes y medio, con la obra de reconstrucción avanzada, probablemente se convoque a los padres de familia para que los niños asistan otra vez de manera presencial, siempre y cuando las condiciones sanitarias lo permitan.