24 DE JUNIO / Mordelón deja sin dedo a policía

Reaccionó furioso al ver la patrulla PC 530. Rompió el cristal de la unidad y mordió la mano de dos elementos. A uno le cercenó el dedo y a otro se lo dejó casi amputado. El agresor ya tiene antecedentes por violación y robo, de ahí su rabia al ver a los policías.

Al comandante Pascacio y a Romeo, policías municipales, seguramente no les quedará ganas de otra “mordida”, luego que uno perdió el dedo y el otro estuvo a punto de correr la misma suerte, cuando el detenido los mordió p ara liberarse. Aun así fue sometido y puesto a disposición. Sobre el detenido se sabe que ya tiene antecedentes por violación y robo, de ahí su rabia al ver a los policías.

En cumplimiento de su deber, los policías municipales a bordo de la patrulla PC 530 recorrían la zona norte oriente de Tuxtla Gutiérrez la noche de este sábado.

Al pasar por el campo de futbol ubicado en la colonia 24 de Junio y Renovación, vieron a un grupo de personas. El lugar oscuro fomenta el consumo de enervantes y robo.

Un hombre salió corriendo y fue perseguido. Cuando llegaron a una casa entre las calles río Grijalva y Usumacinta, el hombre tomó una piedra y la arrojó contra la patrulla citada.

Luego con furia arrancó la ventana de la puerta y arremetió contra el cristal de la portezuela delantera del copiloto en la mencionada unidad.

Los policías descendieron. Y cuando Romeo sometió al agresor, éste lo mordió en la mano cercenando un dedo. Una vecina tomó el dedo y lo puso en alcohol.

Pascacio corrió en auxilio de su compañero y al someter al enardecido sujeto recibió la misma agresión en el dedo meñique de la mano derecha.

Aun así no soltó al hombre que estaba fuera de sí. Compañeros que llegaron en apoyo se llevaron al detenido y al compañero Romeo herido, con el dedo para pegárselo de nuevo en la clínica Malibú.

Pascacio se quedó en el lugar. Fue auxiliado por grupo Radio Alfa y Protección Civil Municipal, pero no fue trasladado.

Sobre el detenido se sabe que ya tiene antecedentes por violación y robo, de ahí su rabia al ver a los policías.