TUXTLA / CAFRE ARRIESGA A PASAJEROS POR USO DE DISTRACTOR

• Chofer de la unidad 4011 estuvo texteando y hablando por celular mientras conducía, reportó un usuario. Por poco choca en La Misión, dijo.

El usuario tiembla de nervios mientras camina rumbo a casa. Atrás quedó el colectivo a bordo del cual viajó del Centro de Tuxtla a la colonia La Misión, pero no puede dejar atrás el incidente con el chofer. Parece insignificante para unos, pero no lo es: estuvo hablando por teléfono y el distractor puede desencadenar un accidente. Las lesiones y vidas de los pasajeros no es asunto baladí.

“Quiero reportar al chofer de este colectivo de la ruta 40, el conductor venía hablando por teléfono y casi choca en la colonia La Misión”, dice vía telefónica el usuario que se oye bastante molesto. Luego envía las imágenes del chofer y de la unidad para sustentar su denuncia.

La foto es elocuente. El chofer se observa agachado, texteando en el celular, mientras conduce. Que el colectivo está en movimiento se deduce al observar la imagen de fondo en cada toma. El chofer sigue agachado texteando, pero la imagen del fondo es diferente en cada toma; es decir, se estuvo moviendo. Iba manejando. La foto es del tramo libramiento Sur, a la altura del panteón San Marcos.

“Es inconsciente, el chofer pone en riesgo la integridad de todos los pasajeros. Si se quiere matar que haga eso cuando vaya solo. Es su maña, siempre lo hace. Y si se le dice algo es muy grosero con los usuarios”.

El reportante asegura que viaja con frecuencia con ésta y otras unidades de dicha ruta 40, pero este chofer especialmente se pone furioso si le dicen que deje de hablar por teléfono o que disminuya la velocidad.

“Las placas son 404-536-B y el número económico es 4011”, dijo como despedida, pidiendo a los concesionarios y autoridades de Transporte verificar estas anomalías que atentan contra la integridad del usuario.

Datos de la Secretaría de Salud apuntan a que tras minuto y medio de hablar por el móvil (incluso manos libres) el conductor no percibe el 40 por ciento de las señales, su velocidad media baja un 12 por ciento, el ritmo cardiaco se acelera bruscamente durante la llamada y se tarda más en reaccionar.

Además, la peligrosidad por el uso inadecuado del mismo puede llegar a ser equiparable a la conducción con exceso de alcohol y el riesgo de provocar un accidente vehicular se multiplica por cuatro.