TUXTLA / Taxistas de nuevo a la calle

La mayoría de los comentarios en redes sociales fue de repudio a los transportistas.

Taxistas de la capital chiapaneca volvieron a salir a las calles, según dicen, exigen sus derechos. Lo que quieren es que se vayan Didi y Uber, en pocas palabras. La ciudadanía en su mayoría no vio con buenos ojos la manifestación que trastocó la vialidad y que, dicen, trata de pasar por encima de la libertad de elección del usuario.

La mañana de este martes 14 de mayo cientos de taxis convergieron en el estacionamiento del estadio Víctor Manuel Reyna, en Tuxtla Gutiérrez.

Luego de algunas horas empezaron a avanzar rumbo al Parque Central. En la pancarta frontal del contingente se leía "por la defensa del gremio", "fuera Uber, Didi, taxis clonados y taxis ejecutivos".

Durante el mitin aseguraron que no es justo que luego de esperar durante varios años una concesión, ahora los trabajadores del volante salgan perjudicados por el ingreso de plataformas.

La reacción de la gente no se hizo esperar. En los comentarios de las publicaciones la minoría fue de respaldo a los taxistas. Obviamente eran los trabajadores del volante o sus familias quienes se expresaban. La mayoría de los comentarios fue de la ciudadanía, algunos también trabajadores de Didi o Uber por supuesto, pero opinaron que "vergüenza debería darles mostrar sus unidades sucias y en mal estado, les recomendamos darle una manita de gato".

Otros le dijeron que mejor "mejoren su servicio, que dejen de ser groseros, borrachos, deshonestos y de tratar mal al usuario, de cobrar caro y que ya le pongan climas sus unidades".

Alguien más dijo "hagan lo que hagan como ciudadanos decidimos cómo transportarnos, si taxi Uber o Didi el dinero es nuestro".

Otros consideraron que "justo en tiempo de campaña se manifiestan por lo que el dirigente transportista está buscando algún hueso".

Algunos presuntos transportistas externaron palabras obscenas en los comentarios refiriéndose a los de Didi y Uber. El intenso calor puso de malas a algunos ciudadanos y también algunos transportistas, por lo que los comentarios vertidos subieron de tono.