TUXTLA / Alcaldía capitalina: 41 días de vacío legal

• El edil interino nombrado por el Cabildo tuxtleco funge y a la vez finge por no ser ratificado por el Congreso del Estado. Pago de nómina se hace “fuera de la ley”: Carlos Molano atado de manos para firmar contratos, pagos, nombramientos, conforme lo establece la nueva Ley de Desarrollo Constitucional

A 41 días de su licencia, la ausencia de Fernando Castellanos Cal y Mayor está provocando un caos en la capital chiapaneca ante la ausencia de un presidente municipal facultado para firmar contratos, pagos, nombramientos, conforme lo establece la nueva Ley de Desarrollo Constitucional en materia de Gobierno Municipal en Chiapas. El edil interino nombrado por el Cabildo tuxtleco funge y a la vez finge por no ser ratificado por el Congreso del Estado. “Falta muy poco”, dice la regidora Victoria Rincón Carrillo.

Cuando Fernando Castellanos Cal y Mayor pidió licencia como presidente municipal de Tuxtla Gutiérrez y fue aprobado por mayoría en sesión de Cabildo, también se aprobó que Carlos Molano, quinto regidor, fuera el alcalde interino.

El congreso aprobó la licencia del presidente municipal, mas no ratificó a Carlos Molano como edil interino.

La  nueva Ley Orgánica indica que en caso de licencia menor a 15 días  por parte del edil, asume el primer regidor o el segundo conforme a la lista, pero si es por un periodo mayor a 15 días y hasta por un año, corresponde al Congreso avalar la licencia y al edil interino.

Victoria Isabel Rincón Carrillo, regidora del Ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez, dijo que los regidores están preocupados por las responsabilidades que asume el edil y que al no estar avalado por el Congreso, el interino está atado de manos para llenar esos huecos.

Al revisar la nueva Ley de Desarrollo Constitucional en materia de gobierno Municipal en Chiapas, en su Sección Cuarta, Capítulo III, sobre las atribuciones del presidente  municipal, en su artículo 57 y fracción V establece que una función es:

“Celebrar, conjuntamente con el Secretario Municipal, previa autorización del Ayuntamiento, los convenios y contratos necesarios para el beneficio del Municipio”.

Aquí, la regidora Rincón Carrillo dijo que hay asuntos bastante delicados, como el contrato de servicios médicos del personal que labora en el Ayuntamiento  capitalino.

En la fracción X establece la facultad de “firmar los oficios, actas, comunicaciones y demás documentos oficiales, para su validez”, lo cual Carlos Molano no puede hacer legalmente.

“El regidor (Molano) está apoyando en lo que puede, lo hace de manera informal, pero hay asuntos que solo un alcalde en función puede realizar”, agregó la regidora Rincón Carrillo.

Lo más preocupante es la atribución del edil estipulada en la fracción XI de dicha ley: “Autorizar con su firma las erogaciones o pagos que tenga que hacer el Tesorero Municipal, con la indicación expresa de la partida presupuestal que se grava”.

Y la necesidad más inmediata es el pago de la nómina. Es decir, al no haber un edil facultado para avalar los pagos, esta erogación se hace fuera de la ley.

Esto, entre otros asuntos, están empantanados ante la demora del Congreso en avalar la propuesta del Cabildo de Carlos Molano como edil interino.

“El Congreso dice que están en tiempo y es cierto. La ley no marca el tiempo límite de espera para la designación, esperamos que se dé pronto y que no lleguemos a la extrema medida de la controversia constitucional, para exigir que se respete la autonomía del municipio”, dijo la regidora Victoria Rincón.

En la sala de regidores del Ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez, el cubículo número 5, del quinto regidor Carlos Molano Robles, luce cerrado. Se cambió a la oficina del edil  con su personal de apoyo, “pero llegan esporádicamente a la pequeña oficina”, dicen los vecinos.

Aun con estos vacíos legales, el Ayuntamiento de la capital chiapaneca trata de sortear la adversidad y sigue prestando  los servicios básicos como agua potable, recolección de basura (nuevo problema de pago a Proactiva), alumbrado público (Muchas luminarias apagadas y no hay gasolina ni  autos por estar descompuestos).

“En general se trata de resolver el problema”, finalizó Victoria Isabel Rincón Carrillo.