* La familia terminó con malestar estomacal por ingerir el alimento contaminado.
Una pareja fue de compras para surtir la despensa semanal, este lunes alrededor del mediodía a Tienda Amiga, ubicada sobre Libramiento Sur Oriente km. 8.5 en la capital chiapaneca.
Entre lo adquirido llevaron tres bolsas de frijol refrito marca Isadora de 220 gramos. Llegando a casa la esposa preparó el desayuno con el frijol recién comprado. Al primer bocado todos sintieron el mal sabor. Fue el esposo quien por el hambre comió tres bocados, a pesar del sabor amargo.
"Amor ¿le pusiste cebolla al frijol refrito?" preguntó a su mujer. La respuesta fue negativa. "¿Entonces ya trae cebolla este frijol de bolsa?" insistió el hombre. La esposa repuso que tampoco.
"Es que estoy masticando algo como hule o pellejo, pensé que era cebolla, pero está muy amargo. Eso amargó lo demás". Todos dejaron de comer.
"Es culpa de la empresa que envasa, no de nosotros. Yo no como esas cosas", contestó la empleada al cliente que le propuso probara un poco para cerciorarse del mal sabor del producto.
El agraviado reconoció que en efecto la culpa no es de la tienda, sino de la fábrica. Hubo descuido y antihigiene al envasar. Al parecer es plástico o piel de humano o animal lo que estaba en los empaques.
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