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miércoles, 5 de abril de 2023

OCOZOCOAUTLA / El Aguacero, una probadita de Chiapas

Semana Santa es el momento idóneo para conocer o redescubrir a Chiapas que es bello, es mágico, es México.


Se llaman Aventureros y vivieron una aventura durante su viaje a las Cascadas El Aguacero, ubicado en el municipio de Ocozocoautla, Chiapas. Tú también puedes vivir una aventura similar en uno de los numerosos, variados y maravillosos sitios turísticos de Chiapas. Anímate. Semana Santa es el momento idóneo para conocer o redescubrir a Chiapas que es bello, es mágico, es México... es Chiapas.
El punto de encuentro fue el templo Adventista de la Colonia Moderna, en Tuxtla Gutiérrez. Niños y niñas de 5 a 9 años que forman parte del Club de Aventureros Jesuit Nezhera, acompañados de sus padres y liderados por el director del club, Leonardo, convergieron en el lugar. Unos abordaron sus propios vehículos, otros a bordo del colectivo viajaron durante aproximadamente 50 minutos hasta llegar al lugar.
Ciertamente se trataba de un paseo vacacional, pero también de un requisito para obtener algunas especialidades propias del Club de Aventureros cómo caminata, natación, senderismo, entre otros.

Amisaday, consejera del Club, nos cuenta que el viaje duró aproximadamente una hora. "Al llegar bajamos por un camino de terracería, durante unos cinco minutos. En una parte nos detuvimos para tomarnos una foto en el paisaje que evoca recuerdos del Cañón del Sumidero.
Llegamos al lugar y dejamos la Urvan en el estacionamiento que ahí se encuentra. Al llegar a la entrada pagas la entrada, 50 pesos, y te dan tu brazalete con el que podrás ingresar y continuar con tu caminata.
Sonriente, pero en tono serio, Amisaday advierte al viajero que no hay baños en la parte de abajo, así que aprovecha para hacer tus necesidades fisiologicas y todo lo que tengas que hacer en la parte de arriba. El costo de los baños es de 5 pesos y las regaderas, 10.
Después de eso comienza el descenso por las escalinatas: son más de 700 y menos de 800. 740 para ser exactos. Ella no las pudo contar una por una, confiesa sonriente. Se tiene que bajar todas para llegar a tu destino. Si no tienes condición física llegarás abajo con las piernas temblando, agrega risueña.
Cuando bajas, dice Amisaday, no llegas directamente a la cascada del Aguacero, hay un camino que debes seguir de unos 10 minutos, aproximadamente. Después de esa caminata ya puedes disfrutar de la cascada.
El agua abajo es tibia y de un nivel no muy alto por lo cual pueden nadar y chapotear los niños y niñas sin ningún riesgo. Pero al subir a la cascada el agua es fría, muy fría.
Después de disfrutar y refrescarte no quieres dejar el agua. Por lo fresca y por el miedo a subir, si, subir las 700 y más escalinatas. Pero hay que subir, no queda de otra.
"Sigue subir que es lo más difícil, no recuerdo el tiempo que me llevó porque quise subir lo más rápido posible. Fue un gran error. Te sugiero que para subir lo hagas a tu ritmo porque te quedarás sin aire a mitad de la subida", dice y vuelve a sonreír.

Al final las piernas comienzan a quemar, pero vale la pena el recorrido, resume Amisaday.
Luis, otro joven consejero del club de Aventureros, fue el encargado de inmortalizar el viaje. Fue el encargado de tomar fotos. Pero por momentos se olvidaba de su labor y extasiado contemplaba y disfrutaba la naturaleza.
Una cueva ubicada al inicio del recorrido, es un pretexto para descansar y mentalizarse antes de la extenuante jornada. El Club de Aventureros hizo un alto ahí para orar. Dieron gracias a Dios por cuidarlos en el camino y pidieron su protección para el descenso, estancia y ascenso.
Como Amisaday, como Luis, todos los que viajaron con el Club de Aventureros coinciden: fue cansado, pero valió la pena.
Este sitio se encuentra dentro de la Reserva de la Biosfera Selva El Ocote, es una hermosa cascada que se precipita entre rocas de cortes desiguales, lo cual da lugar al choque de las aguas que se desintegran en intensa brisa que se derrama en forma de aguacero.
El Aguacero, es una cascada que nace en la cueva El Encanto, por donde corre un río subterráneo. La belleza de las aguas que se precipitan entre peñascos, la caricia de las brisas cercanas y el aguacero, propiamente dicho, en la parte principal de la cascada, constituyen un singular atractivo para el turista local y extranjero.

El paisaje es espectacular porque el agua desciende por varias repisas de rocas cubiertas de musgo y vegetación. Cuenta con una serie de cuevas dentro de las que destaca El Encanto, río subterráneo y una caída de agua que lleva el nombre de "Don Nicho“.
De Tuxtla Gutiérrez deberás tomar la carretera federal número 190, que va a la ciudad de México después de recorrer 48 kilómetros se encuentra un desvío, de este desvío se recorren 3 kilómetros de terracería.
Si viajas en autobús o colectivo desde Tuxtla a Coita no gastas más de 150 pesos de ida y vuelta. Incluyendo la entrada y el desayuno no gastas más de 500 pesos por todo, por persona.
Como ves es una alternativa muy cómoda por la cercanía y lo económico. La diversión está garantizada. El Club de Aventureros Jesuit Nezhera lo comprobó y lo recomienda.
Esta es tan sólo una probadita. Pero si tus posibilidades de tiempo y dinero dan para más, no dudes en recorrer sitos mágicos de Chiapas como Lagos de Montebello, Lagos de Colón, Cascadas El Chiflón. Si te gusta el mar, Puerto Arista, en Tonalá, es ideal. Allí cerca puedes ir a Boca del Cielo.
No te quedes con el antojo de visitar algún sitio de Chiapas. Si no es ahora cuándo, si no eres tú, quién, si no es así cómo. Chiapas es bello, es mágico, es México... Es Chiapas. Descúbrelo y redescúbrelo.

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