SAN FRANCISCO / SMAPA incumple su propia ley

• No garantiza el saneamiento de drenajes azolvados y espera que vecinos compren el material necesario para que más de 17 tomas domiciliarias sean corregidas por problemas de tubería en la calle, no dentro de la vivienda

Con la propia ley del SMAPA en la mano, vecinos exigieron el desazolve de sus tomas domiciliarias afectadas desde agosto del 2017. La funcionaria enviada pretendía se quitara la lona que evidencia el olvido. Y tras acordar una nueva fecha de reunión se fue. Vecinos deben comprar el material si es que desean librarse de este terrible mal.

La esposa de un abogado tomó la Ley Orgánica del Sistema Municipal de Agua Potable y citó el artículo 3o. para corroborar que es deber de “ellos” el saneamiento, no del colono. Añadió el artículo 2o. fracción I.

Aun así, quien firmó la minuta como Velia González Vera (dicen que se hace llamar Rosa y Valeria también) encargada de Contraloría Social  del SMAPA, dijo que cada quien debía comprar su material.

Se quejó porque solo dos vecinos la recibieron con una sonrisa y los demás molestos. “Pero es que nos tienen con puras vueltas y mentiras como vamos a estar felices”, dijo Josefa Mota, de 75 años, quien tiene a su esposo discapacitado y a su padre de 100 años enfermo y debe vender comida, pero no puede porque apesta frente a su casa con el número 338.

La septuagenaria saca sus aguas negras y excremento de noche para tirarlo a la calle, dicen vecinos.

Amparo Gumeta, de 86 años, dijo que llegó la máquina y metió un tubo, pero ayudó a pocas casas con el trabajo a medias. Aun  quedan 17 tomas domiciliarias azolvadas. “Pasan niños de la primaria aledaña, es un foco de infección. No pedimos regalado nada, exigimos porque tenemos derecho, pues pagamos el recibo mensual e impuestos”, dijo.

Por su parte Raúl Rojas, dijo que ya han dado muchas vueltas perdiendo días de trabajo. Recordó que el presupuesto ya fue hecho en el SMAPA, por 540 mil pesos, pero no se lleva a cabo. “Lo poco que se hizo, fue mal planeado. Y el edil en su informe dijo que la obra ya estaba concluida. No han cumplido la minuta”, recalcó.

Así, por seguridad y como una forma de protesta, cerraron la calle y colocaron la lona.

Por teléfono, Velia González regañó a María Magdalena Rincón Gumeta, una de las afectadas y representantes, con casa número 339 en la 11 Sur del barrio San Francisco. “No cumplieron su palabra y pusieron la lona. Quítenla porque vamos a trabajar mañana y además los vamos a demandar porque es un delito”, le dijo la funcionaria a la fémina, quien narró lo ocurrido.

Durante la reunión en la calle de este martes, Velia González dijo que tienen otras prioridades, que ellos atienden una “Agenda de recorrido. Venimos de la Francisco I Madero donde hay un problema muy feo también”, dijo.

Cuando la discusión subía de tono, la funcionaria se despidió acordando una nueva reunión en la Torre Chiapas este martes por la tarde.