EDUCACIÓN / Acusan abuso sexual en escuela primaria

• Una madre descubrió a su hijo con la ropa al revés y éste confesó la agresión. Otros dos coincidieron en su declaración
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Padres de familia de la escuela primaria ONU, ubicada en la colonia Bienestar Social, de Tuxtla Gutiérrez, decidieron tomar el edificio y no permitir que los maestros ingresen. Tienen miedo de que sus hijos vayan a clases, luego que se descubriera el presunto abuso sexual por parte de un profesor en agravio de tres menores. Los niños ya son valorados por médicos de la Fiscalía General. Los enardecidos progenitores claman por justicia y     que se vaya la directora y el intendente, por encubrir al acusado.

Pidiendo el anonimato, padres de familia acusaron que este jueves se enteraron del presunto abuso sexual, el cual fue confesado por los niños que van en primero y segundo grado de la escuela vespertina ubicada sobre la avenida Miguel Hidalgo y calle Pino Suárez de la colonia Bienestar Social.

El grupo de padres y madres fueron a la Fiscalía Especializada en Protección de los Derechos de la Mujer. Allí la fiscal  -según dijeron las denunciantes- no quería que entraran todos para no “cohibir a los niños”, pero presionaron y entraron para atestiguar la entrevista.

Policías municipales llevaron a declarar a los maestros, y los niños acudieron para que identificaran al presunto agresor, pero no iba entre los declarantes.

Un padre (omitimos sus datos por obvias razones) narró que fue su esposa la que notó que su hijo, quien va en segundo grado, traía la ropa (playera e interior) al revés. Al cuestionar al niño éste confesó llorando lo ocurrido.

Indicó que “el maestro con tatuaje de un sol en el hombro y en el brazo, y que lleva una cadena con la imagen de la muerte, lo encerró en el baño”. Lo amenazó para que no dijera nada so pena de meterlo a la cárcel. Con la misma versión coincidieron otros dos niños que ya declararon en la Fiscalía General.

Los molestos padres narraron a este medio que el sindicado es nuevo, y desde su llegada le regalaba dulces a los niños y los abrazaba. “Hasta ahora nos enteramos, la directora lo supo y no lo detuvo”, dijeron.

Tras confrontar a la directora Isela Mancilla, los padres exigen el cambio de la directora, subdirectora y el intendente.  Es que dicen, están encubriendo al presunto culpable, un maestro nuevo de Usaed que imparte psicología, “se supone llegó para evitar que suceda precisamente lo que pasó”, indicaron. “La directora ni siquiera da su nombre, dice que no sabe quien es, que no trabaja allí. el intendente, quien también los halló en el baño, dice que el no sabe nada. Que se vayan todos porque están solapando a este depravado”, indicaron.

“Nunca había ocurrido algo así. Nosotras aquí estudiamos y la escuela era segura, ahora ya no hay confianza de enviar a nuestros hijos”, indicaron. Agregaron que van a colocar cadenas y candados al portón de acceso, para evitar que ingresen los maestros.

Los padres de los niños exigen justicia o de lo contrario prevén tomarla en sus manos. Los padres de familia los respaldan. Por lo pronto no se permite el acceso a nadie, afectando con ellos las clases en la mañana, en la escuela José María Morelos, pues comparten el mismo edificio.