EL VERGEL / Robo fallido de 120 mil pesos

• Tres motociclistas armados persiguieron a un cuenta habiente. Encañonaron y revisaron al conductor; el efectivo lo llevaba el copiloto. El grito de una mujer y la presencia de varios automovilistas ahuyentaron a los facinerosos.

Tres hombres armados que persiguieron a un cuenta habiente tras retirar una fuerte suma de dinero de una sucursal bancaria en Tuxtla Gutiérrez, huyeron sin el botín tras ver a muchos automovilistas arremolinados en el lugar del ilícito. La policía buscó a los facinerosos, sin éxito.

César Augusto “N”, respira hondo, se mesa los cabellos y voltea a ver a su hermano, quien a su vez se persigna, mira al cielo y exclama: “Bendito Dios que no me hirieron. Pudieron haberme matado y de paso llevarse mi dinero”.

Una mujer sonríe nerviosa. “Mi grito los asustó”, dice al contar que creyó que se trataba de un pleito callejero cuando observó que uno de los tres hombres encañonaba a César, con la pistola en la cabeza.

Quizá fue el agudo y sonoro grito femenino, pero seguramente fue la presencia de muchos curiosos automovilistas que se detuvieron en el lugar, lo que ahuyentó a los facinerosos.

César Augusto “N” y su hermano fueron a retirar 120 mil pesos  la mañana de este miércoles, a la sucursal bancaria de Bancomer, ubicada en el lado norte oriente de la capital chiapaneca.

Con el efectivo en mano, César y su hermano abordaron la camioneta marca Jeep tipo tipo Patriot, color gris, placas DRM-121 A, de Chiapas.

Y cuando avanzaban de oriente a poniente sobre la avenida Almendros, del fraccionamiento El Vergel, tres motocicletas se emparejaron a la unidad. Se le atravesaron y obligaron a detener frente a la clínica veterinaria Dog and Cat.  Pistola en mano encañonaron a César, quien conducía. Su grito fue: “¡Ya valió, nos asaltan!”

Uno revisó la bolsa de cuero que César llevaba, creyendo que allí iba el efectivo retirado. Se equivocaron. El hermano que viajaba como copiloto lo tenía en su pantalón.

Fue entonces que se oyó el grito de la mujer y los autos comenzaron a detenerse en el lugar. Atemorizados, los tres hombres huyeron sin el botín, a bordo de dos motos blancas y una roja. Se llevaron la llave de la unidad. Los tres motociclistas llevaba casco protector para cubrirse el rostro.

Uno era flaco y moreno, dijo César. Su hermano dijo no recordar nada, por los nervios. “Lo que importa es que no nos lastimaron ni se robaron el dinero”, coincidieron los hermanos.

La Policía Estatal y Municipal que arribó al lugar realizó patrullajes por la zona aledaña en busca de los ladrones, pero no los  encontraron.