OPINIÓN / Caso "Prevo", Iceberg del bullying

Cuando las adolescentes pensaron hacerle bullying a su compañera, nunca imaginaron en lo que terminaría.

Este hecho ocurrido apenas hace 2 días en el turno vespertino de la Escuela Secundaria Técnica número 2, "Prevo" de Tuxtla, no es un hecho aislado, es apenas la punta del iceberg que se convierte en un foco rojo, mismo que debe ser atendido por la Secretaría de Educación y los respectivos directores de las decenas de escuelas involucradas en este lamentable caso de acoso escolar. Un grito a tiempo será mucho más saludable y oportuno que mil llantos después.

Los casos denunciados ante los medios de comunicación, los más sonados recientemente, han sido los suscitados en la Escuela Secundaria del Estado turno vespertino, la Escuela Secundaria Técnica Industrial número 79, turno vespertino, la Escuela Telesecundaria 123, Cobach 13, entre otros.

En la escuela 79 dicen, incluso, que no hay director, y en donde los hay parece que ni existieran, por ello las directoras y directores de las escuelas involucradas, sean secundarias o de preparatoria, están a tiempo de atender urgentemente estos casos de bullying y acoso escolar, pues los alumnos y alumnas están siendo víctimas de agresiones verbales y físicas, situación que no debe dejarse pasar por alto, pues este continuo acoso está minando la salud emocional de las víctimas y más de un caso podría terminar en lamentable su1c1di0, dada la presión continua y el grado de depresión severa.

Por ello es que la Secretaría de Educación debe intervenir urgentemente para llamar la atención a los directores y directoras de las escuelas involucradas.

Recientemente hubo otro caso similar al de la Prevo. La Escuela Secundaria Técnica número 156 localizada en el Fraccionamiento Real del Bosque fue también escenario de acoso escolar. Alumnos de primer grado fueron amenazados con arma blanca por alumnos de tercer grado.

En este caso los padres de familia hablaron con el director de la citada institución educativa, lamentablemente éste minimizó el caso. Ante la negligencia y apatía del director, los padres del alumno agredido decidieron sacarlo de la escuela para proteger su integridad.

Este caso denota la indiferencia y la omisión en que están incurriendo los directores y directoras de las diversas escuelas señaladas, pero no hay que esperar a que se suscite un hecho más. Tiene que hacerse labor preventiva. Bastante trabajo tienen las áreas de prefectura y orientación, así como el director de cada escuela, para velar por la integridad física y emocional de los alumnos y alumnas.

En la misma Prevo, relevante fue el caso de bullying que sufrió por su discapacidad visual el alumno César, que finalmente fue sacado también de la institución.

Urge, pues actuar, ya, antes de que ocurra algo lamentable y no vaya a cumplirse el refrán de que "ahogado el niño a tapar el pozo".